CAPITULO 47

[Narra Harry]

Sentado en el sofá, arropado con una manta de color rojo pasión y viendo una bonita película. ¿Pero eso qué más da? Lo que verdaderamente me importa, es la persona a la que tengo al lado, la persona a la que estoy abrazando, la persona que tiene la cabeza sobre mi pecho. Esa persona verdaderamente preciosa y tierna. Miro directamente a sus ojos y ella aprieta mi torso con sus brazos, dándome calor. Beso la puntita de su nariz con los ojos cerrados y ella sonríe.

-¿Sabes Harry?

-Dime amor –Beso su frente-

-Deberíamos hacer esto más veces, estar a solas contigo hace que desconecte –La coloco sobre mis rodillas, sin desarroparla, ella apoya sus brazos en mis hombros y mantiene su cara cerca de la mía-

-Cuantas veces quieras, por mi perfecto.

-Te quiero

-Te quiero –Beso sus labios-

[Narra Louis]

-Pues ya está, arreglada, ¿has traído la llave?

-Si, aquí tienes –Me la entrega y yo arranco la moto, sin problema alguno, a la primera- Genial, gracias

-De nada –Silencio, incomodidad-

-Bueno pues… Me voy entonces -¿Qué hago? ¿La detengo? ¿Dejo que se vaya? Esto de no entender a las mujeres es un asco, se me da fatal captar señales, aunque claro, lo mismo ella no me está mandando ninguna. Louis, no seas tonto, haz algo, que se está poniendo el casco-

-Si vuelves a tener algún problema, llámame, no dudes en hacerlo -¿Y esto es todo? Torpe, torpe torpe torpe-

-Claro… -Me mira intensamente ¿Y ahora qué hago? ¿Dónde está la pesada de mi hermana cuando la necesito?- Esto… Louis

-Dime –Digo completamente emocionado, por favor, que sea ella la que me diga claramente que hacer con esto-

-¿Me abres la puerta del garaje?

-Oh, claro… -Desilusión, le doy al mando y ésta se abre lentamente. Ella mira al suelo, yo enredo con mi reloj algo nervioso-

-Hasta otra, supongo –Dice sin mirarme, da la vuelta y se va. Agito mi mano. Dicen que la esperanza es lo último que se pierde… ¿Lo he perdido todo ya entonces?-

[Narra Mel]

Con los cascos puestos, y la música a todo volumen, me da la sensación de que alguien pronuncia mi nombre. Serán imaginaciones mías, sigo moviendo la cabeza a ritmo de la música

-¡MEEEEEEEEEEEL! SOY UN COMPLETO DESASTREEEEEEEE –Si, definitivamente, lo había oído. Alguien grita que es un desastre, debería haberlo dicho Alex, pero me suena a voz de mi querido primo. Bajo lo más rápido posible-

-¿Qué ocurre Louis? ¿Dónde estás?

-En el garaje, Mel –Me dirijo a este y le encuentro sentado en el suelo-

-¿Pero qué te pasa, primito? –Me siento a su lado-

-La he dejado ir

-¿A Nerea?

-Si

-¿Pero ella sabe que te gusta?

-Si, y yo le gusto a ella, lo hemos hablado…

-¡Dios mío! Eso es maravilloso

-No, no lo es. La moto está arreglada y ella se ha ido, ni hemos quedado ni nada.

-Pero tienes su teléfono

-¿Insinúas que debería llamarla?

-Exactamente, era una indirecta muy directa. Tú a las chicas como que no nos entiendes mucho, ¿verdad?

-Por eso la estoy liando siempre primita, porque sois muy complicadas –Me levanto a la vez que él saca el móvil-

-¡Mentira! Vosotros es que sois muy vagos y no hacéis esfuerzos por entendernos

-Ya hablaremos de ese tema, ahora sal, que voy a llamar a Nerea –Pongo cara de sorpresa y hago intención de irme-

-De nada, ¿eh Louis? –Finjo enfado-

-Ay tonta, ven aquí –Se levanta rápidamente y me aprieta entre sus brazos, un corto beso en la mejilla y vuelve atrás, con el móvil ya en la oreja…-

[Narra Harry]

Alguien llama a la puerta desesperadamente, lo que hace que despierte. La película aún no ha acabado, lo que quiere decir que no he dormido más de media hora. Miro a Brit, sigue dormida, sonrío al ver su dulce y tierna carita, algo pálida, labios carnosos y rojizos. Cada detalle de ella, por mínimo que sea, es un mundo para mí. Un gran y perfecto mundo. Suena el timbre de nuevo, haciendo que reaccione. Quito las piernas de Brittany de las mías con mucho cuidado, intentando no despertarla, y camino lentamente y de puntillas hasta la puerta, una vez allí, cojo el telefonillo.

-¿Quién es?

-Hola cielo, soy mamá

-¿Mamá? Oh, hola

-Parece que no te ha hecho ilusión

-No no, no es eso, solo que no te esperaba, sube y hablamos aquí mejor, si quieres claro.

-Claro cariño, si solo es un momento –Doy al botón, suena un extraño ruido que indica que la puerta está abierta, cuelgo el telefonillo y vuelvo al sofá-

-Brit, cariño –Acaricio su cara, apartando los mechones de pelo que la tapan- Despierta, mi madre está subiendo –Digo con un tono de voz suave y bajito- Venga, no seas dormilona –Empieza a moverse y abre los ojos lentamente, me ve a centímetros de su cara y sonríe, acto seguido hace intención de probar mis labios, y cuando quedan apenas milímetros para que se junten, el timbre suena. Que oportuno, vaya… Me separo de ella para ir a abrir-

-Eh, espera –Agarra mi brazo e inesperadamente me da un corto pero intenso beso. Sonrío y recibo a mi madre-

-Hola cariño

-Hola mamá –Me abraza y me da un cálido beso en mi fría mejilla-

-¡HERMANITOOOOOOOOOOO! –Me grita la pequeña Valerie-

-Ven aquí –La cojo en brazos y la achucho entre estos, ella sonríe- Pasa al salón mamá, no te quedes aquí de pie –Obedece y se queda parada al ver a Brit-

-Perdona Harry cariño, pensé que estarías solo, entonces no importa, nos vamos y os dejo tranquilos

-No, señora, no se preocupe por mi, de verdad –Sonríe y mi madre parece convencida, nos sentamos en el sofá-

-Veréis, es que hoy Stand y yo hacemos cinco años desde que estamos juntos, y queríamos irnos a cenar por ahí, pensé que quizás podrías quedarte esta noche con tu hermana para así estar tranquilos, pero si habías hecho planes con Brittany no te preocupes, nos encargamos de tu hermana nosotros

-Oh no no –Se adelanta Brit- Nosotros nos quedamos con la niña –Pellizca su mejilla y mi hermana sonríe- Seguro que lo pasamos bien, usted no se preocupe por nada y disfrute –Sonríe convincente-

-¿De verdad? ¿No os importa?

-Para nada –Contestamos a la vez-

-Vale, pero con una condición

-¿Cuál?

-Que tu novia deje de tratarme de usted –Reímos aliviados-

-Claro Anne, perdona

-No pasa nada, tú trátame con total confianza cielo. Bueno, os dejo solos, que son las seis y tengo que prepararme. Valerie, pórtate bien y hazte caso de tu hermano

-Si mami –Nos da un beso a cada uno de nosotros y se dirige hasta la puerta-

-Mañana a mediodía vengo a por ella, ¿os parece bien?

-Claro mamá, tú tranquila, con nosotros estará a gusto

-Estoy segura de ello, cualquier problema no dudéis en llamarme.

-Que si mamá, que va a estar todo bien. Anda vete y despreocúpate

-Está bien, está bien. Adiós, cuidado con todo –Una vez dicho esto, se va-

-Bueno, ¿y qué estabais haciendo aquí solitos? ¿No estabais aburridos ni nada?

-Oh nada de eso, tu hermano me puso una película muy chula y entretenida

-Pues vaya, jugar a las muñecas es mejor –Se sienta en mis rodillas sin permiso alguno, yo la sujeto para evitar caídas momentáneas. Se descuelga su mochila de las super nenas y las deja en las rodillas de Brittany, la abre y empieza a sacar cosas. Madre mía, como me va a poner la casa…-

[Narra Brittany]

-Mira, esta se llama Cleo –Me la da con cuidado- Tienes que peinarla porque es muy vaga y ella no lo hace nunca –Suelto una leve risa-

-Vale, ¿y el peine?

-Aquí, toma –Empiezo a peinar a la muñeca, sin recordar bien como se hacía, perdí el truco hace algunos años- Toma Harry, tú serás el novio. Encima tiene los pelos así alborotados como tú, sin peinar ni nada

-¡Oye! ¿Estás diciendo que yo no me peino?

-Si, que listo eres –Mira a Harry seriamente, que está sorprendido, normal, esta cría es demasiado lista para su edad-

-Pues si que estoy peinado…

-Que si hermanito, que estás muy guapo, venga, vamos a jugar –Me dispongo a seguirle la corriente cuando Harry se rinde sin haberlo intentado si quiera. Si, vago es-

-¿Y si mejor te preparo algo de merendar? ¿Tienes hambre?

-SIIIIIII, QUIERO CHOCOLATEEEEE

-Pues venga, ven que te lo prepare –La coge en brazos y yo quito la película, buscando algo de dibujos animados para que la pequeña los vea tranquilamente. Dejo puesto lo primero que encuentro y recojo todo lo que Valerie ha sacado en apenas dos minutos. Vuelve en seguida con un bocadillo de chocolate en las manos y una gran sonrisa de oreja a oreja. Se para delante de mí, algo sonrojada-

-Esto… Birtany… ¿Me coges?

[Narra Niall]

Estar todo el día en casa metido con Carol está bastante bien. Cada vez la voy queriendo más, cada día al levantarme encuentro algo en ella que la hace ser más perfecta aún, la idea de tener un hijo en principio no es algo que me agrade, pero ahora no me importa, tener un hijo con esta maravillosa chica no es malo, en absoluto. Pasar mi tiempo con ella es genial, una sensación que no puedo describir, pero echo mucho de menos a los chicos, necesito escuchar a Liam reñirme cuando hago algo molesto, ver a Zayn todo el tiempo presumiendo, y a Harry… En fin, les echo de menos, de estar todo el día viéndoles pasar por delante de mí a estar viéndoles únicamente de vez en cuando no es bueno. Cada vez que me levanto, pienso en los desayunos de antes, en los que intentaba tomarme los cereales de Harry, ya no solo porque tuviese hambre, sino porque me encanta hacerle de rabiar. Que si, que la situación que tengo ahora es muy bonita y completa, y me encanta, pero saltarme la época de adolescente no es algo positivo

-¡NIAAAAAAAAAAAAALL! –El grito preocupante de Carol hace que deje de pensar en mis cosas, me seco la lágrima que tenía a punto de salir y subo corriendo, la encuentro en el baño, llorando-

-Eh, eh, eh. ¿Qué te pasa, pequeña?

-Tengo pérdidas Niall

-¿Ya? ¿Cómo vas a tener pérdidas de orina si aún eres muy joven?

-¡De sangre, idiota! –Un escalofrío recorre todo mi cuerpo-

-No puede ser

-Si, si que puede ser

-Pero… ¿Estás segura?

-¡Niall! –Tiene razón, es una pregunta estúpida-

-Vamos al hospital, venga, rápido

[Narra Nerea]

El viento me da en la cara, va secando las pocas lágrimas que dejo caer. Soy idiota, ¿cómo iba a pensar que Louis me pediría seguir adelante con esto? Dios, debería de dejar de hacerme ilusiones. Entro la moto en el garaje cuando el móvil comienza a sonar. No, lo que me faltaba, que me llame para, para, ¿qué? No tiene sentido. Cuelgo. Mierda, ¿he hecho bien? Tengo que empezar a pensar lo que hago. Vuelve a sonar, lo dejo unos segundos, y, de nuevo, me dejo llevar

-¿Quién?

-¿Por qué has colgado? Si no quieres hablar conmigo, dímelo

-No es eso, si que quiero, colgué sin querer -¿Es así, no? Si hubiese sido queriendo ahora tampoco estaría hablando con él. Si, eso, ha sido sin querer-

-Lo siento, para esto de las relaciones soy muy torpe

-Yo también… -Silencio, incomodidad-

-Puedes venirte a casa si quieres, estoy solo. Mel se va a la biblioteca con Alex, medio obligada por mi, Brittany está con Harry, y mi madre y su novio tampoco están. ¿Qué me dices?

-¿Estás seguro?

-Segurísimo, quiero que vengas, por favor

-Está bien, a eso de las ocho me paso por allí

-Genial entonces, esperaré con impaciencia

-Hasta luego Louis

-Hasta ahora –Cuelgo, sonrío-

[Narra Niall]

-Vamos Carol, anda más rápido

-Dios mío Niall, ni que me estuviese poniendo de parto…

-¿Estás bien? ¿Te duele algo?

-Si, que no me duele nada, si solo es que he manchado un poco

-Madre mía –Entramos en el hospital, está desesperado, preocupado, no sabe ni donde ir-

-Niall, tranquilo –Me paro frente a él y agarro sus manos- Tú mismo dijiste que todo saldría bien, y así será, ya verás que no es nada –Sonrío y le doy un corto beso- Venga, vamos –Enlazamos nuestras manos y entramos en la consulta. Nos sentamos uno al lado del otro y cuento mi situación. La doctora escucha atentamente-

-Vale, entiendo. A ver, lo primero, no tenéis que alarmaros, he tenido muchos casos así, y todos de chicas más o menos de tu edad. Normalmente no suele ser nada grave, pero vamos a mirarlo para quitarnos de duda. –Gesto de alivio por parte de Niall, que aún no ha soltado mi mano- Túmbate en la camilla por favor –Obedezco y aprieto la mano de Niall, cosa que me hace estar tranquila. Después de un par de pruebas, nos quedamos en la sala de espera, impacientes por ver los resultados-

-Estoy nerviosa Niall

-¿No decías que saldría bien?

-Si, si… Pero estoy nerviosa, además, han pasado veinte minutos y aún no nos han dicho nada, lo mismo es porque hay complicaciones

-No digas bobadas, ven anda –Paso mi brazo alrededor de su cuello y le doy un corto beso, interrumpido por la doctora-

-Chicos, ya están las pruebas, pasad…

[Narra Harry]

Ver como las dos princesas a las que más amo en mi vida ríen juntas es maravilloso, son tan adorables y tiernas…

-¡A por Harry! –Valerie obedece al grito de Brittany y viene a hacerme cosquillas, las dos lo intentan, pero se rinden al darse cuenta de que no tengo-

-Eres un soso hermanito, ¿por qué no tienes cosquillas?

-No lo sé, pero será porque… ¡TE LAS HE DEJADO TODAS A TI! –Y acto seguido, me paso a hacerle cosquillas a ella, mientras Brittany coloca sus pelos alborotados por Valerie-

-Harry Harry para, que tengo hambre

-Te pareces a uno de mis amigos enana, todo el día comiendo

-¿Qué amigo?

-Niall

-Ah si, el rubito ese tan guapo –Se sonroja al recordarle y yo no puedo evitar sonreír-

-Exactamente

-Que baila raro y eso… -Brittany y yo comenzamos a reír-

-No es que baile raro, solo que es un baile típico de Irlanda, por eso no te suena

-Ah… Claro, pero hazme ya la cena

-¡Si es temprano!

-Pues mamá me hace la cena a las ocho y cuarto y ya son… son las… ¿Birtany qué hora es? –Intenta formular en bajo la pregunta para no quedar mal, intento disimular y controlar la risa, respuesta en bajo también, se siente orgullosa- Las ocho y media, listo

-Venga vale, hago unas tortillas francesas y luego a la cama, ¿eh?

-Si, que tengo sueño, mira mira –Improvisa un bostezo y va con paso ligero a la cocina. No puedo con esta niña, es increíble-

*Dos horas después*

[Narra Brittany]

Mientras Harry ejerce de hermano responsable, voy cambiando de canal para ver algo entretenido. Empiezo a aburrirme cuando por fin suenan pasos por la escalera. Me giro lentamente y sonrío sin darme cuenta. Harry es el culpable de esto, de provocar sensaciones tan indescriptibles en mí.

-Ya estoy aquí, amor

-¿Has conseguido dormirla?

-Si, menos mal, ha sido la peor media hora de mi vida

-Exagerado…

-¡Pero si he tenido que leerla dos cuentos! ¡Cantarle tres canciones! ¡Y con todo eso, se me ha puesto a saltar en la cama! –Comienzo a reír y me tapa la boca rápidamente- Chssss, que la vas a despertar

-¿También serás así con nuestros hijos? –Digo inconscientemente, dando por hecho que los tendremos-

-¿Quieres tener hijos?

-Si es contigo, si –Agacho la cabeza, él coge mi mentón y hace que nos miremos directamente a los ojos-

-Saldrán muy guapos –Hace que sonría, acto seguido, me roba un beso. Un intenso y largo beso. Se deja caer encima de mí y continúa besando mi cuello. Me estremezco y me encojo, el sonríe y mete su mano dentro de mi camiseta-

-Harry, es mejor que no, tu hermana está arriba y no me parece bien

-Tienes razón, en pleno salón está muy mal visto. Además, la cama es más cómoda –Me coge en brazos y se dispone a subir conmigo las escaleras-

-Harry que yo no me refería a es… -Me calla con un beso, me dejo llevar, y me doy cuenta de que eso es lo que tengo que hacer entonces. Dejarme llevar….-