sábado, 2 de junio de 2012
CAPITULO 15
[Narra Harry]
Al despertar ella está dormida entre mis brazos, desearía poder despertar todos los días así, viéndola a ella, sonriendo y abrazándome, acaricio su brazo que pasa por mi barriga, con delicadeza, con dulzura, la abrazo un poco más fuerte, no quiero perderla, quiero tenerla siempre, siempre junto a mi, despierta haciendo una especie de ruido raro, empiezo a reir, está muy graciosa
-Buenos días princesa -Muestro mi mejor sonrisa-
-Um, siempre he querido escuchar eso al despertar -Me abraza más fuerte-
-Conmigo lo harás siempre -Me precipito y la beso, es un beso rápido, que deja ganas de más-
-Ven aquí -Me acerco a ella y me besa dulcemente, se sube encima de mi para estar más cómoda y sigue besándome, como solo ella sabe...Se separa y se sienta, aún encima mía, colocándose un poco los pelos, aunque los tiene perfectos, toda ella siempre está perfecta- ¿Quieres desayunar Harry?
-Claro -Se levanta y se sienta en la cama, poniéndose las zapatillas de estar por casa-
-¿Qué te apetece? -Se gira un momento y me mira sonriendo-
-Tus labios -La agarro de la cintura y tiro despacio de ella hacia mí, obligándola a tumbarse en la cama, se ríe, y es algo que me encanta, vuelvo a besarla hasta que nos quedamos sin aire y ella se levanta-
-Vamos anda, yo si tengo hambre -Me agarra del brazo y tira de mí-
-Vale vale, baja tú, voy a ponerme algo de ropa -Me mira de arriba a abajo y se muerde el labio- Aunque si lo prefieres, me quedo así -Me río a causa de su mirada-
-No es mala opción -Me guiña un ojo y se ríe- Voy bajando amor
-En seguida voy yo
Cojo la ropa de ayer, que está ya seca y mientras me la pongo pienso en que hoy es el día, hoy ablaré con ella, para afrontarlo, afrontarlo juntos, como la prometí...Estoy nervioso, no puedo negarlo, nose cual será su reacción, aunque me temo que nada buena, aparto esos pensamientos para esta tarde y termino de ponerme los pantalones, voy un momento al baño y me aseo un poco, refrescándome para despejarme y bajo a la cocina, en busca de Brit
-Ya estoy -La abrazo por detrás y la beso en el cuello-
-Te he preparado el desayuno -Se gira y me da un corto beso en los labios- Vamos a la mesa anda -Se sienta y yo hago lo mismo, en la silla que está frente a ella- Bueno y, ¿qué es lo que querías decirme? -Le da un muerdo a su tostada de mantequilla y yo le doy vueltas al cola-cao que me ha preparado con una cuchara, sin atreverme a mirarla a la cara-
-Prefiero hablarlo esta tarde, no es momento -Doy un sorbo-
-¿Tan malo es? No me asustes
-No, bueno si, pero es que resulta -Me llevo la galleta a la boca mientras pienso en cómo explicar algo así, agarro su mano- Mira Brittany, mejor que esperes a esta tarde, confía en mi, por favor-
-Vale, vale, esperaré -Sonríe y bebe de su taza, al apartarla se le ha quedado un bigote marrón a causa del cola-cao, empiezo a reirme-
-¿Qué? ¿Qué pasa? ¿Por qué te ríes? -Me levanto y voy hacia ella-
-Tienes un bigote precioso -Sonroja y va a coger una servilleta, pero yo detengo su mano y la mantengo en contacto con la mía- Yo te limpio -La beso sin tardar mucho en separarme- ¿Alguien te ha dicho alguna vez que das los besos más dulces de todo el mundo? Y nunca mejor dicho -Se ríe y le paso el dedo por debajo de la nariz, ya que aún le queda una pequeña manchita, le beso la mejilla y vuelvo a sentarme, terminando de desayunar-
-¿Estaba rico? ¿Te ha gustado? -Se levanta y recoge las cosas-
-Mucho -La ayudo- Cariño yo me voy a ir ya, tengo algunas cosas que hacer
-¿Ya?
-Si, lo siento
-No lo sientas, no podemos estar todo el tiempo juntos, tenemos que hacer pues nose, otras cosas -Me mira a los ojos y me derrite, me pierdo en ese color marrón intenso, con un brillo que deslumbran-
-Ojalá pudiese dedicar todo mi tiempo a ti, preciosa -Se esconde el pelo detrás de la oreja- Tengo que irme, pero pásate por casa a eso de las seis y media o siete, ¿te parece?
-Claro, sobre esa hora estoy allí, preparada para darte la lata -Me guiña un ojo-
-Pasaría por ti pero no puedo, le diré a Liam que te recoja
-No, no, para nada, solo hay diez minutos de tu casa a la mía andando, voy sola, no es plan de que molestes al chico
-Pero si no es molestia boba, ¿seguro que no quieres?
-Que no de verdad
-Vale, como quieras entonces, nos vemos esta tarde, ¿vale amor? -La agarro de la cintura-
-Claro cariño -Me rodea el cuello con sus suaves brazos y me besa- Hasta luego -Me acompaña a la puerta y me voy, con ese sabor a sus labios, ese sabor a ella-
[Narra Zayn]
Nose que hacer, ¿la llamo? ¿No la llamo? Quizás sea muy precipitado, o quizás no, he leido el papel unas ochenta veces y no me canso, casi que me se el número de memoria, marco, borro, marco, borro, vuelvo a marcar, vuelvo a borrar, me levanto y recorro el salón, vuelvo a sentarme y luego a levantarme. Estoy nervioso, cojo aire y me decido a llamar, que sea lo que Dios quiera:
-¿Diga?
-Hola, ¿Adela? Soy, soy Zayn
-Zayn, Zayn -Repite mi nombre con duda, cagada, cagada total, no se acuerda de mi- Oh Zayn, ¿el chico al que dejé la nota?
-Bingo
-Pensé que no me llamarías
-¿Por qué no? Eres una chica estupenda, al menos eso parece, aún no he tenido oportunidad de conocerte como para saberlo con certeza -Intento mandar una indirecta, que espero que pille-
-¿Eso quiere decir que quieres que te conceda esa oportunidad de que me conozcas?
-Si, algo así
-Zayn tengo trabajo, ahora no puedo atenderte, ¿te parece bien que quedemos a las siete menos cuarto?
-Claro, ¿dónde te recojo? -Bien, bien, bien, bien, lo he conseguido-
-Pues pásate por el bar si no te importa
-Claro, allí estaré, y oye que siento haberte molestado, no tenía ni idea de que...
-No te preocupes Zayn, me ha venido bien escuchar tu voz -Me interrumpe antes de que pueda terminar mis disculpas- Hasta luego
-Adiós Adela -Sonrío, soy tonto, ni que ella pudiese verme, cuelgo y me pongo a saltar, escucho la cerradura de la puerta asi que me siento rápidamente dejando el teléfono en la mesa, con una sonrisa de oreja a oreja
[Narra Harry]
-Buenos días Zayn -Se acerca a mi y me revuelve el pelo- No me puedo creer que estés despierto a las once y media de la mañana
-Buenos días ricitos -Me levanto- Pues sí, estoy despierto, ¿no pensarías que me quedaría dormido para que tú te librases de mi? Porque si es así, estabas confundido -Me hace reir- ¿Qué tal con Brittany? -Se sienta otra vez en el sofá que está frente a mí-
-Muy bien, ha sido la mejor noche de mi vida -Abre los ojos como platos-
-Joder tío ¿Ya?
-¡Zayn! Eres un mal pensado, no hemos hecho nada de eso, solo dormido
-Vale, vale, pero es que tú también te explicas de una manera: ''Ha sido la mejor noche de mi vida'' -Me imita- Pues normal que piense mal
-Bueno, lo que tú digas y por cierto, ¿cómo es que estás tan contento tú hoy?
-Estoy normal, como siempre
-Oh por favor, ¿pensabas que serías capaz de ocultármelo?
-Pensaba -Se ríe-
-Pues mal hecho querido Zayn, suéltalo, además, sea lo que sea, sé que estás deseando contármelo -Me tira un cojin a la cabeza- ¡Oye!
-No eres el centro del mundo, ¿eh?
-No te hagas el tonto y cuenta
-Está bien, todo tiene que ver con Adela -Sonríe de esa manera que lo hago yo cuando estoy con ella, con Brit, al recordarla sonrío también- La he llamado
-¿Pero con ''ll'' o sin ''ll''? -Vuelve a lanzarme el cojin- ¡Eh! Solo es una duda
-¿A qué no te cuento más?
-Venga ya paro
-Pues estaba trabajando y no hemos podido hablar mucho pero hemos quedado hoy, y estoy muy feliz por ello, quiero conocerla, saber sus gustos, aficines, sus rasgos, conocer su sonrisa, sus enfados, sus abrazos, todo, absolutamente todo de ella
-Zayn, se hasta donde va a llegar esto
-¿Qué quieres decir?
-Quiero decir que te acabarás enamorando
-¿Por qué estás tan seguro de ello?
-Yo también empecé así y mírame ahora. Desde ese primer momento en el que la ves, en el que la miras a los ojos y empiezas a notar cosas extrañas, experimentas sentimientos nuevos, ese momento en el que te das cuenta de que la necesitas contigo, que esa dulzura tiene que acompañarte siempre y no puedes dejarla marchar, sientes que debes hacer todo lo posible por mantenerla a tu lado y conocer todo de ella, todas y cada una de las partes de su cuerpo, sin dejarte ni un solo trocito, conocer sus manías, sus enfados, sus risas, sus llantos, sus besos, sus abrazos, absolutamente todo. Entonces te das cuenta de que estás enamorado, no lo admites, es raro, pero lo estás, y lo estás hasta las trancas
-Joder tío, la quieres mucho, ¿verdad?
-No puedo expresar con palabras cuánto llego a quererla, es mi vida Zayn, mi vida, ella lo es todo para mí
-Y ella siente lo mismo, tú lo sabes
-Si, lo se, pero aquí estamos para hablar de Adela, no de Brittany, no me desvíes el tema, que te conozco
-No se te pasa una
-Por cierto, ¿a qué hora habéis quedado?
-A las siete menos cuarto en su trabajo, ¿por?
-No por nada -Zayn ha quedado, para cuando venga Brittany seguro que él no está, sin problema Liam podrá llevarse a Niall por ahí, con la excusa de ir a comer algo, impresionante este chico, no para de comer-
-Dime porqué, sabes que a tu amado Zayn tampoco puedes ocultarle nada
-Solo porque Brittany viene a casa, quería saber si coincidía la hora, nada más
-Oh, viene a casa y no voy a estar aquí, que pena, con lo que me apetecía verla -El cojin vuelve a volar por los aires, esta vez soy yo el que se lo lanza a su cara- ¡¿Qué?! Bueno entonces, ¿coinciden horarios o no?
-Si, si, coinciden
-Pues que lo paséis bien -Me guiña un ojo, lástima que no tenga más cojines a mi alrededor-
-Solo vamos a hablar
-Si, hablar -Hace un movimiento de cejas, si supiera el porqué de su visita, no haría bromas como éstas, estoy cada vez más nervioso-
-¿Liam y Niall están durmiendo?
-Si, como si no supieras la respuesta
-Pues ya es hora de que se levanten -Le miro con malicia y me levanto deprisa-
-¿Qué vas a hacer? -Se levanta rápido y me sigue con curiosidad-
-Calla y ayúdame -Obedece y me ayuda, subimos arriba y entramos en la habitación de Niall, nos empezamos a reir- Chsss, le vamos a despertar -Cojo el hielo y me dirigo a sus pantalones, Zayn va a su cara con el agua del frigorífio- Una, dos, tres -Vierto el hielo por todos sus pantalones, aunque me centro en la parte más sensible mientras Zayn le echa el agua por toda la cara, se despierta de un salto-
-¿Pero qué hacéis? No me gusta que me despertéis así -Hace pucheros y Zayn y yo corremos a abrazarle-
-Perdona pequeño, pero es que Liam nos dio la idea anoche -Zayn queda absorto ante mi mentira- Y claro, a mi me amenazó con alisarme el pelo y a Zayn con quitarle los espejo de casa, entonces no podíamos negarnos, aún así hemos pensado que te gustaría vengarte y hemos traído hielo y agua de sobra -Se levanta cogiéndome el hielo de la mano y se dirige a la habitación de Liam-
-Ayudadme -Zayn coge el agua y se dirige a su cara de nuevo, yo ayudo a Niall con el hielo y lo vertemos-
-¡Socorro! ¡Socorro! -Se despierta de golpe- Capullos que sois -Todos nos empezamos a reir, acabamos tirados en el suelo los cuatro, dos de ellos mojados-
-Eso te pasa por empezar tú con el plan
-¿Qué plan? ¿Qué dices Niall?
-¡Os lo habéis inventado todo! Sois unas malas personas -Zayn y yo no podemos parar de reir mientras Liam y Niall se han tirado encima de nosotros, nos calmamos y nos tumbamos en la cama, hablando de nuestras cosas-
[Narra Brittany]
-Lou voy a prepararme, he quedado con Harry a eso de las seis y media o siete
-Pues son las seis, no te da tiempo ni de broma
-Que si me da tiempo, sal de la habitación que voy a vestirme
-Cámbiate tú en el baño, anda lista
-Venga Lou no me hagas perder más el tiempo
Se da por vencido y se va, yo abro el armario y suspiro, otra vez sin saber que ponerme, me desespero. Me pruebo miles y miles de conjuntos hasta que por fin, doy con uno que me gusta. Pantalones vaqueros azul claro ajustados, para la parte de arriba un cuello alto negro de lana ajustado, mis botas marrones altas, esas que me llegan por encima de las rodillas, solo un poco por encima y ya estoy vestida. Cojo el abrigo que me voy a poner, marrón también, para que haga juego con las botas y lo llevo al baño, donde termino de prepararme. Peino mis rizos y plancho el flequillo, después me lavo los dientes y me pinto, una pequeña capa de maquillaje, la raya, rimel, algo de gloss y ya estoy lista. Sencilla pero arreglada ya que aunque hayamos quedado en casa, seguro que a Harry le da por ir a dar una vuelta. Vuelvo a mirarme en el espejo, me pongo el abrigo y voy al salón para despedirme de Louis
-Me voy hermanito
-Son las siete menos diez, tardarás en llegar a su casa, ¿quieres que te lleve?
-No, no hace falta si yo...
-Venga vamos -Me interrumpe y coge las llaves del coche- Ve saliendo -Le doy un beso y salgo, me monto en el coche y me deja en casa de Harry
-Gracias por traerme hermanito
-De nada pequeña -Le doy un beso y me bajo- Llámame después para que te recoja si quieres
-Vale, te llamo si eso
-No, si eso no, me llamas
-Ay que si, que te llamo, adiós anda -Cierro la puerta del coche, las siete menos cinco, llamo al timbre-
-¿Diga?
-Como si no supieras quien soy -Escucho su risa-
-Sube Sara
-¿Sara? ¿A qué me doy media vuelta imbécil?
-Te abro anda -Sigue riéndose, empujo la puerta y entro, toco el botón del ascensor y una señora mayor, de unos ochenta años se para junto a mi-
-Buenas tardes joven -Me mira y me sonríe-
-Buenas tardes -Hago lo mismo que ella, la puerta del ascensor se abre- Pase usted primero, por favor -Le digo amablemente-
-Gracias, ¿a qué piso vas?
-Al cuarto ¿Y usted?
-En el cuarto vivo yo, que casualidad
-Si, la verdad que si -La anciana pulsa el botón del cuarto-
-Es un buen chico
-¿Perdone? -Me asombro un poco-
-Harry, mi vecino de en frente, es un buen chico
-¿Por qué me dice esto? -Segunda planta-
-Està claro que has venido a verle a él
-Pero en el piso viven tres chicos más, podría haber ido a ver a cualquiera de ellos -Tercera-
-Bueno, yo sé que no
-¿Podría explicarme? -Cuarta, el ascensor se abre y salimos-
-Ese chico era muy feliz y amable, siempre me ayuda con las bolsas de la compra o cuando tengo algùn problema, cuando se va la luz, o cuando necesito algo. Solo tengo que llamar a ese timbre de ahí -Señala la puerta de Harry- Y el abre encantado y me ayuda -Saca sus llaves-
-¿Era? ¿A caso ahora no lo es?
-Si, ahora lo es mucho más, y al verte todo me ha cuadrado, tú eres la razón de su felicidad -Sonrío ante esas palabras- No le dejes nunca
-No lo haré señora -Me sonríe y me agarra de la mano-
-Tengo que irme, espero tener el gusto de encontrarla por aquí más veces
-Por supuesto que lo harà -Me sonríe y le devuelvo la sonrisa, se dirige hacia su puerta y yo llamo al timbre, Harry abre rápido, me agarra de la cintura y antes de pronunciar ninguna palabra, me besa, se separa y vuelve a besarme, me deja pasar y cuando voy a cerrar la puerta, la anciana está aún ahí, vuelve a mirarme y me guiña el ojo con ternura, lo ha visto todo, entra y cierra su puerta, es una buena mujer-
-¿Pasas o no? -Harry está sentado en el sofá-
-Si, si, claro
[Narra Harry}
-Has tardado en subir, ¿qué ha pasado?
-Hablaba con tu vecina, es un encanto
-Si, lo es, es una mujer estupenda -Sonrío al recordar todas las veces que me ha saludado o pedido ayuda, es como una abuela para mi, es algo más que una simple vecina-
-¿Qué estabas haciendo? -Abre mi libro-
-Mates -Suspiro-
-¿Has acabado?
-No, me queda un problema que no soy capaz de resolver
-¿Cuál, este? -Señala el problema 22-
-No, este -Cojo su dedo y lo deslizo hasta el problema 30- Llevo un rato y no soy capaz de sacar la solución -Me incorporo y me acerco a ella, que lee el problema-
-No soy buena en mates, pero puede que consiga sacar la solución -Escribe números, cuentas, hace cálculos con la calculadora, a los cinco minutos deja el lápiz en la mesa- ¡Lo tengo!
-No puedo creerlo -Miro al cuaderno-
-Mira, tenías que hacer esto así, da infinito -Me sonríe-
-Infinito, como nuestro amor -Se acerca a mi y me besa, pero se aparta rápido-
-¿Hay aguien en casa?
-No, se han ido todos -Vuelve a besarme tirándome al sofá, me besa rápido, como si hiciese un mes que no nos vemos, enredamos nuestras lenguas, muerde mi labio inferior y yo sigo besándola cuando recuerdo para qué está aquí, inconscientemente me aparto rápido y me siento-
-¿Qué pasa?
-Nada, no pasa nada, solo que bueno, tenemos que hablar de algunas cosas
-No me gusta nada ese ''Tenemos que hablar''
-Tranquila, no te asustes -Beso sus labios, sus carnosos y dulces labios durante unos segundos y me aparto- Verás, he hablado con tu hermano sobre algo que te pasó con tu antiguo novio -Se pone algo pálida y mira al suelo, se sienta corréctamente- Creo que te vendría bien hablar de ello, por eso quería que vinieses
-Crees bien -Sus palabras suenan ahogadas, apagadas-
-Si te apetece contármelo, estoy aquí para escucharte y apoyarte, ya lo sabes cariño -Cojo su mano y la beso, entrelazo mis dedos con los suyos-
-Si, me apetece, lo necesito...Fue hace un año más o menos, sólo tenía trece años, fui estúpida por pensar que había encontrado el amor de mi vida con esa edad, sé que ahora solo tengo catorce, sigo siendo una cría, pero creo que soy más madura de lo que debería serlo para mi edad, aquello no era amor, no era cariño, no era nada, aunque yo pensaba que si, luego sus actos hicieron darme cuenta de que estaba confundida, equivocada, de que me había precipitado con esa relación, yo solo era un juguete para él, una de esas muchas chicas que han caído en su trampa, una de esas muchas chicas a las que ha utilizado -Sus ojos están a punto de dejar caer lágrimas, ella los cierra fuerte y aprieta mi mano, suspira y abre los ojos, dejando de apretarme- Al principio, todo era precioso, me llamaba, me decía cosas bonitas, me abrazaba, besaba... -Ahora soy yo el que la aprieta la mano un poco más, pensar que otro tío ha intentado amarla me vuelve loco- Estaba muy pendiente de mi hasta que un día, las cosas se torcieron. Me acuerdo que ese día salí con mis amigas de compras, el móvil se quedó sin batería y se apagó, al llegar a casa lo puse a cargar, veintiocho llamadas perdidas suyas, ni una más ni una menos. Le llamé para saber que quería y me dijo que iba a casa a buscarme, era tarde y le dije que no, pero insistió y vino a hablar conmigo, estaba enfadado, muy enfadado -Una lágrima recorre su mejilla, rápidamente la limpio y la sonrío, ella me mira y lo hace también, aunque no tenga ganas- Llegó a casa y salí, me agarraba del brazo muy fuerte, me hacía daño, le dije que me soltara pero no lo hizo, me apretó más fuerte, provocandome una queja de dolor, tuve que contarle todo lo que había hecho ese día. Me dio voces, me dijo que no se me ocurriese volver a salir sin él y que mantuviese el móvil encendido porque tenía que mantenerme controlada, acto seguido me soltó de un tirón, montó en el coche y se fue, me senté en ese mismo sitio y lloré, había pasado miedo -Las lágrimas asomaron de nuevo-
-Cariño, estoy contigo, recuerda. No llores, tranquila -La acurruqué en mi pecho para que se sientiese segura, después se separó y me agarró la mano dispuesta a continuar-
-Al día siguiente, él vino a buscarme tan tranquilo, como si nada hubiese pasado... Me llevó a su casa y me dirigió directamente a su cuarto, sonriéndome con malicia, sabía que tenía intenciones de hacer cosas que no quería. Efectivamente así fue, empezó a besarme, pero me hacía daño, me besaba muy fuerte, sus manos tocaban todo mi cuerpo, sin permitirme que me moviese, me seguía haciendo daño, le dije que parase, pero empezó a desnudarse, intente separarme pero no podía, él era muy fuerte, me quitaba mi ropa y en un descuido que tuvo me separé y corrí hacia la puerta de casa, pero era más rápido y me agarró, intentando forzarme de nuevo, yo me resistía, entonces fue cuando se enfadó y me agarró del brazo, me solté y me agarro del cuello, me apretaba lo suficiente como para hacerme daño -Se lleva su otra mano al cuello, acariciándolo- Me soltó y fue ahí, cuando recibí el primer golpe -Se lleva la mano al hombro, no puedo creer todo esto- Fue aquí -Dirige mi mano al sitio donde le dio- Entonces salí corriendo y llegué a casa. No dije nada a nadie, me metí en mi cuarto. Y así durante días, semanas y meses... Cada vez que me forzaba y no conseguía lo que quería, si apagaba mi móvil por cualquier motivo, si salía sin él, si no le decía donde estaba y lo que hacía en cada momento, me pegaba -Empezò a temblarle el labio, acaricio su mano con cuidado y delicadeza- Al cabo de un tiempo tenía marcas por todas partes, mi hermano se enterò de todo lo que me pasaba, èl vino un día a casa a recogerme, salió Lou y le llevó al jardín de atrás, le pegó una paliza, yo no podía dejar de llorar, él no es de hacer esas cosas, pero siempre me protege y no pudo evitarlo, le sentó muy mal y le dijo que así se daría cuenta del daño que me estaba haciendo cada día. Intenté dejarle, pero me amenazaba con matarme y suicidarse él después, estaba muy asustada, hasta que mi madre se enterò, le deje por mensaje, apagué mi móvil y nos mudamos. Cambié de número, de ciudad y de vida. Los moratones fueron desapareciendo con el tiempo, pero hay algo que siempre permanecerá, que siempre me recordará esos momentos -Soltó mi mano y se levantó la camiseta- ¿Ves aquí? -Señalaba su cadera- Fue con, con una pequeña vara que tenia en casa. Es una cicatriz pequeña y fina que permanece y permanecerà siempre ahì -Empieza a llorar-
-Es un cabrón -La abrazo, acurrucándola en mi- Pero piensa que todo eso se acabó y que conmigo estás segura, todo te irá bien, no volverás a sufrir nunca, nunca más. Sabes que no puedo permitirlo, que te cuidaré siempre y permaneceremos juntos. Lo prometo. Te quiero Brittany, te quiero como jamás he conseguido querer a nadie. Tranquila, tranquila -Limpié sus lágrimas- Estás a salvo -Permanecemos un rato abrazados hasta que se me ocurre algo- ¿Decías que esa marca permanecería siempre contigo no?
-Si
-No será así, tengo una idea, ponte el abrigo, corre -Se pone el abrigo sonriéndo, eso está mejor, su mirada está confundida-
-Pero, ¿dónde vamos, que idea?
-Ya verás -Beso su frente, cojo las llaves y salimos agarrados de la mano, cierro la puerta, dejando allí las lágrimas de Brit, cerrando para siempre ese recuerdo-
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