¿Amistad? Nunca se sabe si es o no una verdadera amistad, te dejas guiar por el momento, por la situación y decides que esa será la persona que estará a tu lado siempre, arriesgándote a que en cualquier momento pueda hacerte daño, engañarte, defraudarte, utilizarte... Y cuando eso ocurre, ya estás demasiado aferrada a esa persona como para romper con esa supuesta amistad que se ha llevado durante años y años. Por mucho daño que te haga, tú seguirás queriendo a esa persona como el primer día, con la que has compartido confesiones, risas, llantos, gritos, diversiones, locuras, bailes, canciones y demás cosas que por muy pequeñas e insignificantes que parezcan, son las más importantes que hayas podido vivir. Deseas tragarte el orgullo e ir a perdonar, pero hay una parte de ti que te grita que no, que ya basta, que ya ha habido suficiente y que ahora no te toca a ti, que quizás todo ha terminado, todo ha acabado.
Por eso pienso que tenemos mucho futuro por recorrer juntas aún, o quizás poco, nada se sabe. Quizás en menos de un mes esté a kilómetros y kilómetros de ti y nos arrepintamos de haber empezado todo esto. Para siempre, ¿recuerdas? Esa fue nuestra promesa, un apretón de manos y un para siempre. Luego un abrazo, un fuerte fuerte abrazo. Pero supongo, que para siempre es mucho tiempo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario